Hay trucos de cocina que, realmente, facilitan la vida. Y en muchos de ellos está presente el congelador. Por ejemplo, una amiga me comentó cómo congela el perejil picado para tenerlo siempre fresco para sus guisos. Otro buen truco es echar en una cubitera los restos de una botella de vino abierto y congelarlo. Así evitaremos que el vino se estropee y tendremos un ingrediente de primera calidad para nuestras recetas.

En esa línea os traigo un truco que me ha solucionado la vida en más de una ocasión. Y es que, pese a que el Plancton Marino es muy fácil de poner a punto, con esta buena idea lo tendremos siempre listo para usar. Consiste en congelar Plancton Marino en dosis individuales, ya hidratado, para usarlos según vayamos requiriendo en nuestras elaboraciones. Por cierto, ¿sabéis que con 15 gramos de Plancton, tendremos listas para usar 15 dosis? ¡da mucho de si!

Cómo congelar Plancton Marino:

IngredientesElaboración

15 g de plancton
100 g de agua fría
Sal

Pondremos el Plancton Marino en un bol. Echaremos el agua fría despacio, sin dejar de remover con una varilla. Deberemos conseguir una pasta homogénea, no demasiado espesa, de textura cremosa y sin grumos. Añadiremos también un poquito de sal.

Una vez conseguido, volcaremos la mezcla sobre una cubierta y congelaremos. Cuando necesitemos usarlos, sólo tendremos que coger tantos cubitos como la receta requiera.

Por cierto, una buena opción par este tipo de cubitos “alimenticios” es usar las cubiteras desechables que se pueden encontrar en cualquier supermercado.

By Marina Vela

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